La lluvia llena de ventana. La ventana llena de mi. la nariz pegada al frió vidrio. La nariz queriendo tocar cada gota. El viento pegándole fuerte a cada hoja, sonando en cada rincón, en cada ladrillo, en cada centímetro de la casa.
La energía que desprende la lluvia con su caer, la armonía de un desfallecer de pequeñas cosas que caen porque no hay otra cosa que hacer que no sea caer, como fin ultimo de todas las cosas, caer.
Y cuando el sol se filtra entre las densas grises nubes, es vuelto a ocultar rápidamente dejando nulo lugar a la luz.
Del cemento de la calle, frió de luz, frió de agua, frió de gente al calor de una pieza inundada de sensaciones, de palabras, de cosas que no se dicen y que solamente se sienten, se escriben. Porque no hay sábana, calefactor, radiador, que irradie mas calor que las palabras.
En cada pensamiento me hago lluvia. En cada gota estamos todos. En cada pensamiento que cae en la nada o que cae en un párrafo somos lluvia cayendo de allá arriba, donde todos decimos queremos llegar, pero de donde todos caemos.
Abrir la puerta y salir a jugar aunque nos cueste el agua de lluvia. Abrir la puerta y salir a descubrir a todo el mundo golpeándonos en la frente, en la cabeza, saltando desde el piso en cada nuevo paso. Encontrar el todo en la nada y la nada en el todo.Chapotear en charcos llenos y vueltos a llenar de vida estancada en la calle. Pisar el charco y mojarnos los zapatos de aventuras de los demás.
Ricchini me encanta esta iniciativa.
ResponderEliminarComentario a este texto: ¿el fín último de todo es caer?.
De Q fin último hablamos?
Me gusta mucho el lugar q ocupa y la importancia de la "palabra"
Pero no me cierra lo del fin último.
Karina